Bombas de calor: la apuesta de Daikin para un futuro sostenible

Actualmente, el 75% del parque de edificios de la UE es energéticamente ineficiente. Muchas casas todavía se calientan con sistemas obsoletos que utilizan combustibles fósiles contaminantes como el carbón y el petróleo. Ante esta coyuntura, Daikin, líder en climatización, apuesta por las bombas de calor como la solución ideal para alcanzar los objetivos de descarbonización y conseguir un continente ambientalmente neutro de cara a 2050.  
¿Cómo funciona una bomba de calor?
Una bomba de calor es una máquina térmica capaz de bombear calor de un foco frío a un foco caliente. Recordemos que la energía calorífica fluye de manera natural de los focos calientes a los fríos. En una vivienda, el calor interior se nos escapa de manera natural a través de la envolvente, hacia el exterior que está más frío.
El flujo inverso sería que el poco calor que hay en el exterior entrase en nuestra vivienda calentándola, y el exterior se enfriase. Todo esto puede parecer poco intuitivo, pero es justo lo que hace una bomba de calor; consigue tomar aire frío del exterior de la vivienda, extraerle la energía, con lo que lo expulsa aún más frío, y esa energía introducirla en la vivienda caliente para producir calefacción o calentar agua. Este funcionamiento convierte a la bomba de calor en la tecnología con menos emisiones de CO2 en comparación con cualquier caldera de combustible fósil.

Daikin Altherma 3
Un modelo perfecto para suplir las calderas anticuadas es Daikin Altherma 3, que destaca por ofrecer la tecnología más avanzada del mercado a la vez que proporciona a los usuarios un alto rendimiento (COP de calefacción hasta 5,2 y de a.c.s. hasta 3,3), una elevada eficiencia energética y el máximo confort incluso con temperaturas exteriores de -28ºC.
Desde un punto de vista de sostenibilidad y eficiencia, Daikin Altherma 3 destaca gracias a la incorporación de la revolucionaria tecnología Bluevolution que combina la tecnología del compresor Swing Daikin con el nuevo refrigerante R-32 (que reduce el potencial de calentamiento atmosférico en un 75% respecto al refrigerante R-410).